Cocaína: Se obtiene de las hojas del arbusto de coca, llamado huanaco en algunos lugares de Sudamérica, de donde es originaria. La sustancia se extrae y se transforma mediante el uso de compuestos como la gasolina o el éter, dando como resultado el clorhidrato de cocaína, sustancia que comúnmente se consume inhalada.

Las consecuencias de inhalar cocaína pueden ser la perforación del tabique nasal, daños al hígado, desórdenes alimentarios, entre otros.

Heroína: Es una de las sustancias más adictivas que se conocen. Originalmente fue considerada como una medicina, especialmente para tratar la tuberculosis, pues tiene efectos sobre las vías respiratorias. El nombre de “heroína” se debe a una marca registrada de una gran compañía farmacéutica alemana. Fue aislada por el químico Heinrich Dreser en 1883, es una sustancia química derivada de la morfina y que puede ser extraída de los bulbos de la amapola.